Ese estado de ánimo, ese subidón de adrenalina, esas pequeñas cosas…pero ¿qué es la felicidad?
¿Podemos ser felices solos? Solos, viendo una película o leyendo un libro uno puede ser feliz; pero detrás de esa película hay un director/a y detrás de ese libro, un autor/a. Eso quiere decir que hay miles de personas detrás de todo lo que hacemos, vemos o disfrutamos.
Se podría decir que nunca estamos solos ya que siempre hay
una sociedad detrás, una sociedad influyéndolo todo. Pero ¿qué pasaría si viviésemos
apartados de esa sociedad? ¿podríamos ser felices apartados de ella? Solos. Aunque
pensándolo, ¿de que sirve ser felices si no lo podemos compartir? Y aun mejor, ¿qué
importa estar feliz o triste? ¿qué más da?
¿Qué más dan las apariencias? ¿Si lo sé yo ya llega o necesitamos
de verdad decirle al mundo que estamos felices? ¿Tenemos esa necesidad? Probablemente
sí, de ahí a que colguemos fotos con nuestros amigos o nuestra familia. Tenemos
la necesidad de enseñarle al mundo que estamos bien, y ¿por qué? Porque vivimos
en un mundo de apariencias, un reflejo, olvidamos lo que somos y solo damos a
ver lo que queremos “falsas apariencias”.
Pero es que todos en algún momento hemos querido aparentar
lo que no somos, estamos rodeados de falsas apariencias, mismo nosotros, alguna
vez hemos ocultado lágrimas, gritos…y esto solo para que vean que estamos bien
o puede que para hacernos creer a nosotros mismos que lo estamos.
¿Por qué lo hacemos? ¿Compartimos una felicidad que ni siquiera
tenemos? Es cierto que a veces transmitimos felicidad porque lo somos, pero
muchas otras no y nos centramos tanto en aparentar que nos olvidamos completamente
lo que estamos haciendo, lo que somos. Es duro. Nos engañamos a nosotros
mismos. Por lo tanto, no creo que podamos ser felices solos. ¿Qué opinas tú?
Rocío Rey Suárez 1ºB
No hay comentarios:
Publicar un comentario